Moll roza el podio en la cita inaugural del Campeonato de Europa de Autocross

Excelentes sensaciones para el piloto balear y el equipo Lifelive Ibérica quienes se alzaron con un meritorio cuarto puesto, un resultado que, a pesar de su gran actuación durante el fin de semana, dejó un sabor agridulce.

El desafiante circuito de Seelow, en Alemania, fue el escenario que marcó el inicio del Campeonato de Europa de Autocross, donde la categoría carcross contó con récord de participación, reflejo del continuo crecimiento y atractivo de la disciplina año tras año.

Moll marcó el tiempo más rápido en la sesión warm up, lo que le permitió consolidar sus sensaciones positivas antes de la competición.

En la primera ronda de cronos, el mallorquín logró el segundo mejor tiempo en la clasificación general, quedando a tan solo una décima de su compañero de equipo, David Meat.

En la segunda de cronos, el balear repitió una actuación destacada, quedándose nuevamente a una décima del mejor tiempo de la sesión, lo que le permitió ocupar la tercera posición en la clasificación general.

La acción comenzó con la primera tanda clasificatoria, en la que Moll, tras una salida menos favorable, logró recuperarse rápidamente. A pesar de la desventaja inicial, el piloto balear se colocó en la tercera posición, superando a su rival en pista y consiguiendo finalmente el segundo puesto en esta sesión.

En la jornada dominical, aunque el cielo amenazaba con lluvia, las condiciones se mantuvieron secas durante el resto de las clasificatorias. En ese contexto, Moll logró imponer su ritmo, obteniendo la primera posición en ambas sesiones clasificatorias.

Con el cómputo total de las clasificatorias y al haber logrado un segundo puesto, Moll partía desde la primera fila en la semifinal, aunque sin poder escoger su posición de salida. Esta circunstancia comprometió su inicio de carrera, ya que no consiguió una salida óptima, lo que le hizo perder varios puestos. Sin embargo, el piloto balear mostró su capacidad de recuperación, superando a varios rivales en pista y finalizando la semifinal en la cuarta posición.

La gran final, marcada por la lluvia, hizo que la pista estuviera en condiciones complicadas. Partiendo desde la tercera fila, Moll se vio afectado por la escasa visibilidad, lo que comprometió su salida. En plena lucha por los puestos de cabeza, el piloto balear sufrió un pequeño toque en una de las ruedas traseras de su TN11, comprometiendo la estabilidad del vehículo. No obstante, el piloto de Lifelive Ibérica gestionó la situación con habilidad, manteniendo a raya a sus rivales más cercanos y finalizando la prueba en una meritoria cuarta posición.